Autor: Cecilia Snyder, MS, RD
¿Alguna vez has vuelto a casa después de un largo día, te has tirado en el sofá y te has dado cuenta de que no te queda energía mental ni física para decidir qué cenar? A todos nos ha pasado una que otra vez. Si alguna vez has estado en un camino hacia la pérdida de peso, probablemente ya sepas que sentirte exhausto puede llevarte a tomar decisiones que normalmente no tomarías. Pizza, comida para llevar, una comida congelada… Estas son las opciones que probablemente elegimos cuando no tenemos la energía para hacer una elección más saludable.
A veces hay que tomar una decisión rápida. ¡Y no hay por qué sentir vergüenza en hacerlo! Pero una forma de evitar esta situación es comenzar a crear tu propio plan de alimentación. Uno que sea adecuado para tus necesidades individuales, preferencias y estilo de vida. Uno que se sienta como un plan que podrías seguir para siempre. Entonces, ¿cuál es la mejor manera para encontrar tu plan de alimentación perfecto? ¡Usa un esquema de alimentación y construye un plan tú mismo!
¿Cuáles son las bases para crear un plan de alimentación?
Antes de construir tu propio plan de alimentación, hay algunos factores que debes tener en cuenta. La planificación de comidas tiene sus ventajas y desventajas. En pocas palabras, puede que no sea adecuado para todos.
Ventajas de la Planificación de Comidas:
- Te ahorra tiempo.
- Te distribuye el consumo de calorías de manera uniforme durante todo el día.
- Te ayuda a mantener el control de tus elecciones diarias.
- Pone el tamaño de las porciones en perspectiva.
- Te alienta a cumplir con tus comidas planificadas y te ayuda a evitar decisiones impulsivas.
- Te ahorra dinero en el supermercado.
Preparar más comidas en casa podría ayudarte a reducir el consumo de alimentos procesados.
Desventajas de la Planificación de Comidas:
- Consume tiempo al principio.
- A menos que tu plan de alimentación sea muy variado, es posible que te canses de él.
- Requiere prueba y error para determinar qué tipo de comida se ajusta mejor a tus necesidades.
- Sin un horario constante, podría ser difícil encontrar el tiempo para dedicarle a tu plan.
- Cuando surgen circunstancias inesperadas, tus comidas preparadas podrían desperdiciarse.
- Aprendes menos sobre cómo elegir alimentos a diario, sin importar en qué entorno o situación te encuentres.
Como puedes ver, hay muchas formas diferentes de mirar hacia la planificación de alimentos. Además, ¡hay muchas formas diferentes de hacerlo!. Sin embargo, a pesar de esta flexibilidad, para muchos de nosotros, cuando el primer plan de alimentación viene a la mente, comenzamos a pensar en todas las imágenes de preparación de comidas perfectamente preparadas y en porciones que hemos visto en Internet. Si bien ese método podría funcionar bien para algunos, no es para todos. Y este es el punto en donde nuestros pensamientos distorsionados generalmente comienzan a aparecer …
¿Cómo podría encontrar el tiempo para cocinar cuando trabajo todo el fin de semana? ¿No me aburriré de comer lo mismo todos los días? ¿Pero de dónde sacaron todos esos pequeños contenedores tan coloridos?
Si crees que las ventajas de la planificación de comidas son mayores que las desventajas, ¡no permitas que estos pensamientos te impidan personalizar tu propio plan de alimentación! La belleza en la planificación de comidas es que, ¡tu plan no tiene que verse exactamente como el de todos los demás!
Tal vez ni siquiera tienes el tiempo o los medios para cocinar en casa, como cuando viajas, por ejemplo. Incluso en una situación como esta, simplemente pensar en tus comidas con anticipación y tratar de planificar lo que tendrás cada día puede ser muy útil.
Entonces, siguiendo unos pasos claves, tienes el poder de crear un plan de alimentación que sea adecuado para ti…
¿Cómo diseñar un plan de alimentación? ¡Sigue estos 5 pasos!
1. Reserva tiempo
Una cosa que debe saber por adelantado sobre la planificación de comidas, es que requiere tiempo. ¡No hay forma de evitarlo!. Especialmente al principio, tendrás que pensar en todos los componentes de tu plan: cuántas comidas y refrigerios tendrás cada día, cuántas calorías se asignarán a cada comida, si prepararás o no algunas de ellas con antelación. Decidir las respuestas a estas preguntas requiere tiempo y atención. Diseñar un borrador es el primer paso.
2. Desglosa tu presupuesto
Si lo haces correctamente, la planificación de tus comidas no solo tiene el potencial de ahorrarte tiempo, sino que es posible que también te ahorre dinero. Piensa cuánto dinero te gustaría gastar en tus comidas por día (o semana, mes, año, etc.). Esto te dará un punto de partida para asegurarte de que no compres de más o de menos.
3. Elige tus recetas
Al elegir tus recetas, asegúrate de pensar en:
- Preferencias (cuánto disfrutarás una comida específica).
- Valor nutricional (cuántas calorías contiene una comida y si te mantendrá satisfecho o no).
- Conveniencia (cuánto tiempo tomará preparar una comida).
- Facilidad (una comida requiere ciertas habilidades en la cocina, piensa también si tienes el equipo necesario).
- Un presupuesto.
4. Haz tu lista de compras y almacena
Una vez que tengas tu presupuesto y tus recetas en su lugar, ¡la verdadera diversión comienza! Es hora de ir de compras y abastecerse de todos los ingredientes que necesitas para poner en práctica tu plan de alimentación. Consolida tus recetas y tu lista de compras en un formato organizado y fácil de leer con un planificador de alimentos como éste.
5. ¡A Cocinar!
Por último, pero no menos importante, ¡prepara tus comidas! La forma exacta en que lo hagas dependerá de lo que hayas decidido en el paso 1. Tal vez decidiste que deseas elegir un día de la semana en el que prepararás todas tus comidas. O tal vez elegiste recetas que son rápidas y fáciles de preparar a diario después del trabajo. Esto puede variar de persona a persona. La clave es asegurarse de tener tu plan en mente antes de comenzar.
Organízate y sé constante con tu plan
Una vez que hayas dominado estos 5 pasos, ¡el cielo es el límite cuando se trata de planes de alimentación! Y una vez que estés en una rutina constante, no tengas miedo de ser creativo, mezclar cosas y probar nuevas ideas. Seamos honestos, probablemente no quieras comer las mismas comidas cada semana o cada mes por el resto de tu vida. ¡Simplemente no es sostenible! Pero una vez que tengas tu propio plan de alimentación, puedes ajustarlo cada semana adaptándolo según tu estado de ánimo y tus necesidades.
Tu plan de alimentación. ¡Tu camino!
Antes de terminar, me gustaría compartirte un último consejo… si realmente quieres aprovechar al máximo tu plan de alimentación, ¡considera registrarte en la aplicación Noom! ¿Por qué? Porque en Noom, te daremos todas las herramientas y la información que necesitas para sentirte seguro con cualquier tipo de plan de alimentación que decidas seguir.
¡Sabemos que no existe un enfoque único para la planificación de la alimentación o para la pérdida de peso en general! Por lo tanto, con la ayuda de tus coaches de salud personal y un grupo de apoyo, tendrás acceso a miles de ideas y podrás llevar a cabo este proceso de planificación de la alimentación de la mano con tu propio sistema de apoyo. Comienza hoy a construir tu plan de alimentación personalizado.